Por: Javier Sánchez
Resulta más que justo hablar de las mujeres y su papel dentro de la extensa historia de la cerveza. Sin ellas muchos de los estilos que conocemos actualmente no hubieran sido posibles. Por lo menos en mi caso tengo la fortuna de compartir mi vida con una mujer que aprecia la cerveza tanto como yo y que frecuentemente me sorprende con sus apreciaciones sobre los sabores, aromas, colores y texturas que encontramos. Definitivamente nada como el paladar de una mujer para descubrir cosas nuevas.
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Estatuilla egipcia de mujer hacendo cerveza |
Desde hace miles de años la cerveza ha sido considerada un suplemento nutrimental importante para las mujeres en la etapa de lactancia. Aun en la actualidad esta práctica está vigente sobre todo en el norte de Europa, al grado de que existen grupos de mujeres dedicados a promover el consumo de Stouts y Porters con este fin, aunque no todos los médicos apoyen esto.
En la antigua Finlandia tenían una muy particular visión del origen de la cerveza. La creación del mundo está contenido en un antiguo canto llamado “Kalevala”, sus poemas que datan de hasta 1000 años A.C. describen que tres mujeres, Osmotar, Kapo y Kalevatar, preparaban un festín para una boda a la que querían llevar la mejor de las cervezas, sin embargo sus esfuerzos no fructificaban porque no podían obtener la espuma que coronara la bebida. Fue entonces que a Kelevatar se le ocurrió mezclar saliva de la boca de un oso con miel de abeja y con ella lograron la tan apreciada espuma, obteniendo así los finlandeses el regalo de su primer cerveza.
Para los anglosajones de la época post romana la fabricación de cerveza era parte importante de la ceremonia matrimonial. Las mujeres de la familia de la novia elaboraban una cerveza especial para la ocasión. Aun hoy el término en inglés “Bridal” que significa “nupcial” en español, viene de la frase “Bridal Ale” o cerveza de boda.
A medida que avanzaba la Edad Media, el papel de las mujeres en la fabricación de cerveza en los monasterios fue disminuyendo hasta que finalmente fueron exclusivamente hombres quienes se encargaron de su fabricación.
La revolución industrial de mediados del siglo XIX vino a terminar en definitiva con el monopolio femenino en la fabricación casera de la cerveza. Al convertirse cada vez con mayor fuerza en una rentable industria, fueron los hombres quienes tomaron las riendas de este proceso de fabricación hasta convertirla un una “bebida para hombres”.
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Las mujeres vienen fuerte |
¿Tu qué cerveza nueva probaste esta semana? Explora, diviértete, piérdete en la diversidad. Busca más allá de la tienda de la esquina. Paz para todos.
Órale, muy interesante. Y toda la cantidad de variantes que hay de tipos de cervezas, ¿habrá sido creación de las mujeres o de los hombres?
ResponderEliminarSaludos.